Argumentar e innovar son dos conceptos que se conjuntan para crear algo nuevo… bueno, generar ideas bajo el esquema de un mapa mental es el principio, pero qué pasa cuando no se argumenta, cuando accedes a todas las ideas de tu cliente, cuando no sustentas lo que propones?
Fácil, no conseguimos un resultado óptimo, no proponemos nada diferente y peor aún, la creatividad se estanca. Es necesario evitar una actitud inflexible, el cliente que solicita algún proyecto tendrá sus ideas, intentará convencernos y nosotros a él, así que argumentar es tratar de llegar a un punto medio… no es complacer, no es proponer y dejar a un lado las ideas de nuestros jefes, más bien es crear un diálogo para sostener nuestras ideas y mejorarlas (integrarlas) con otras durante ese argumento.
La clave es no estar de acuerdo con las primeras ideas, hasta ir puliendo el objetivo, el impacto que buscamos y lo que queremos comunicar. El concepto de los proyectos de diseño surge bajo una diversidad de perspectivas que deberían unirse… son distintas reaidades que se mezclan para dar funcionalidad. Continue reading